Hola InsPirados,
Hoy es un buen día para reconocer la envidia. ¡¿Pero, porque?! ¿Que quiere decir eso? Me explico con un ejemplo que he vivido en mis propias carnes y que me ha servido de experiencia para mi trabajo.
Muchos clientes me preguntan como pueden saber cual es su imagen de belleza ideal, como encontrarla. Yo siempre les contesto compartiendo con ellos lo que yo aprendí en su día durante mi búsqueda…como averigüé quien era: Buscando, buscando y buscando. Y lo encontré observando a los demás. Las cosas que me gustaban de los demás. Todos los detalles que llamaban mi atención, maneras de vestir, o ideas. No solo me daban envidia si no que entraban dentro de mi, sin casi darme cuenta en un proceso de gestación interno y profundo dadas mis ganas y entusiasmo en mi búsqueda:
1) Observo y Admiro: ¡Que chulo, que bien le queda, que estilo, que gracia tiene para llevarlo!
2) Observo y Envidio: Quiero eso para mi, lo quiero lo quiero lo quiero!
3) Pienso y Dudo: ¿Me quedará bien? ¿Dónde lo consigo? ¿Me atreveré?
4) Siento y Visualizo: Lo hago mío, me imagino como me quedará, imagino como combinarlo a mi estilo… y me siento bien.
5) Busco y Encuentro: Con esa imagen, esa idea, ese “es posible” en mi, encuentro lo que busco porque tengo automáticamente todas las antenas puestas.
6) Confío y Cambio: ¡Lo consigo!
Moraleja: ¡¡¡LA ENVIDIA ES BUENA!!!
En serio! Creo que nunca envidiamos nada que no podamos conseguir y por eso no sólo me gusta sino que además me marca un objetivo y la confianza de que también yo lo puedo tener, o conseguir.
Si te estás buscando: observa y te encontrarás,